En colaboración con el Banco Mundial, creamos un sistema "offline-first" para formar a profesores en regiones con poca conectividad, garantizando un aprendizaje continuo y estructurado. La solución ya se ha implantado en Mozambique, Sierra Leona y Nepal, conectando decenas de escuelas a un nuevo modelo de formación del profesorado.

El reto

¿Cómo ampliar la formación del profesorado sin depender de Internet?

• El modelo tradicional exigía una formación presencial, lo que limitaba el alcance del programa.
• Los profesores con poca experiencia no recibieron un apoyo estructurado.
• La falta de conectividad en algunas regiones hacía inviable una solución digital común.
• El Ministerio de Educación no tenía acceso a datos de calidad que mostraran la evolución de las competencias.

El camino hacia la solución

Creamos una plataforma accesible, adaptada a la realidad del lugar y de los profesores.

• Desarrollo de un sistema "offline-first", que garantiza que los profesores puedan utilizar la herramienta incluso sin internet.
• Implantación de un modelo de evaluación estructurado, que permita a los profesores experimentados proporcionar comentarios detallados.
• Conectar a profesores y directores de centros escolares para generar un proceso continuo de aprendizaje y mejora.
• Un espacio para compartir buenas prácticas, garantizando que el aprendizaje se construye colectivamente.

¿Qué hemos aprendido juntos?

La tecnología educativa debe adaptarse a las condiciones locales.

• La formación del profesorado puede ampliarse sin perder calidad.
• Un modelo híbrido de enseñanza y retroalimentación mejora significativamente el aprendizaje en el aula.
• El tratamiento y la visualización de los datos son esenciales para validar la eficacia de los programas de formación, incluso en contextos áridos para la captura de datos.